#DÍA DE LA JUVENTUD
El 12 de agosto se está acercando, eso quiere decir que el #DíaDeLaJuventud está a la vuelta de la esquina. Más cerca de lo que se cree. Si soy sincera, hablar de la juventud me genera una extraña sensación. Es como si me fuera difícil conocerme a mí a pesar de ser joven. Decirlo de alguna manera como: ¿Cómo se supone que debo de hablar de mi gente?
Hablar de los jóvenes de hoy en día da mucho para comentar. Más allá de que lo que las personas digan sea bueno o malo, las personas hablarán de nosotros los jóvenes. De aquellos que tienen entre 13 y 24 años. Por esta vez, quiero atreverme a ser sincera. Ser una joven que hable con la verdad para buscar que aunque no sea hoy, a lo mejor mañana las demás personas nos comprendan. Por eso, en este blog le quiero dar respuestas a las preguntas que La Voz de la Juventud nos ha hecho.
- ¿Cuáles son tus esperanzas y desafíos como una persona joven?
Creo que para poder dejar ver esto de una mejor manera, iniciare con los desafíos. Confieso aquí que me agota un poco siempre escuchar a nuestros padres o personas adultas decirnos que ser jóvenes no es difícil. ¿Acaso ellos nunca lo fueron y por eso no nos entienden?
Para mi cada etapa es difícil para la persona que la atraviesa. Cuando éramos niños pensábamos que era un desafío volver a ser amigo de alguien luego de una pelea. A lo mejor pensábamos que era difícil sumar el 2+2 o una operación de divisiones. Y sí, cuando eres niño eso es difícil.
Luego creces, y quizá has dejado de tenerle miedo al 2+2, pero comienzas a tenerle miedo a otras cosas. Inicias a cuestionarte sobre tus amistades, tu futuro y sobre qué será tu vida. Te encuentras con nuevas problemáticas que debes aprender a manejar solamente cuando las enfrentas. Te das cuenta desde entonces que el mundo no es tan bueno, que hay maldad y gente que daña sin remordimientos.
Sufres desengaños y de malas amistades. Te das cuenta que las personas te discriminan por ser mujer o alguien con capacidades diferentes. Te comienzas a percatar que te excluyen por un color de piel o por la raza de donde vienes. Incluso sufres daño tanto físico como psicológico por tu preferencia sexual. Entonces, el mundo deja de verse tan bonito como lo veías cuando eras niño.
Sin embargo, en todo lo malo hay algo bueno, y en todo lo bueno hay algo malo. Así es el mundo y es una realidad que no puede ser escondida con el dedo índice cuando es del tamaño de un sol.
He dicho lo malo y es que no puedo ocultarlo, es algo de lo que debemos hablar o seguiremos en la ignorancia. Pero, creo que es el turno de que luego de una tormenta nos llegue el arcoíris. Estoy segura que como jóvenes, somos las personas más esperanzadoras y luchadoras que conozco. Hoy por hoy a pesar de todo buscamos cambiar el mundo. Nuestra existencia en este mundo para poder mejorar las cosas. Para romper con aquello que nos ha robado de nuestra felicidad.
Los jóvenes a pesar de ser heridos aún creemos en las buenas amistades, en las buenas intenciones, en que la felicidad puede existir. Creemos en que el mundo aún puede tener un cambio. Creemos en la responsabilidad afectiva, en escucharnos y elegirnos. En el amor propio y que mostrarnos débiles es la mayor muestra de humanidad que tenemos.
La esperanza de los jóvenes recae en el corazón noble que tiene a pesar de un mundo cruel. Recaer en que la voz puede ser elevada y generar cambios, en que la violencia no es medio de solución y que creernos de concretos no nos lleva a nada.
Mi mayor esperanza que está en la juventud es la humanidad que tiene. Los humanos que hemos llegado a ser cuando nuestros antepasados se aferran a ser “máquinas de trabajo” olvidándose de esa forma que ellos también son unos humanos.
- Como persona individual Cuáles son tus mayores esperanzas y desafíos?
Cuando hablo de mi como una persona joven. Diría que mi mayor desafío ha sido vivir con padres que han sido criados a la antigua. Con ideas un poco oxidadas y con mentes cuadradas. Mi desafío ha sido que he permitido abrir mis horizontes, tener una vida como esa, pero entrar en conflicto cuando algo a ellos no les parece adecuado o correcto por la crianza que ellos tuvieron.
Ahora bien, mi mayor esperanza para aferrarme a luchar contra la corriente de lo que es mi vida con ellos es que, mis padres han vivido y les respeto por amarme, criarme y darme la vida. Pero ellos han cometido errores y han llegado lejos, ahora es momento en que elija mis principios, mis ideologías y busque darle un mundo diferente a la generación que traeré al mundo cuando decida formar una familia.
Hoy por hoy, mi esperanza como joven es que, lo hago por la juventud restante que me queda, pero también por la generación que está por venir. Lo hago por mi que estoy presente y por aquellos que no deseo que pasen por lo mismo.
Nuestra juventud tiene la esperanza de que romperá el círculo de lo que fue un antes y traerá un cambio para aquellos que están por enfrentarse al mundo.
- ¿Qué crees que las personas malinterpretan sobre las personas jóvenes cómo tú?
Nuestra actitud. Los adultos hoy en día la encuadran en una “rebeldía”. Definitivamente aseguran ellos que nuestras actitudes son actos de rebeldía. Muchos dicen que nuestra forma de ser hoy en día no encaja en nada. Repiten y repiten la misma frase: “en mis tiempos las cosas no eran así” y pues claro que no. El mundo cambia y creo que la mayoría de las personas adultas han decidido no crecer con el mundo. Han elegido quedarse en cómo era el mundo en sus tiempos y creer que lo que fue en ese entonces es lo único que está bien. Sin embargo, lamento confesar que mis padres son personas a las que les cuesta creer que si quieren ser parte del hoy y de lo que es mi mundo, ellos deben caminar y crecer con el mundo.
Hoy en día las personas mayores nos titulan como: “la generación de cristal” o la que llora por todo. Supongo que ellos igualan la responsabilidad, amor, atención y salud mental con debilidad. Está demás decir que, nuestra generación ha sido una generación —me atrevo a decir que la única — en ser responsable.
Nuestra juventud de hoy es señalada por haber elegido la responsabilidad, libertad, el amor propio y la salud mental. Es criticada por romper las creencias de que ser de concreto era a lo que se debía de aspirar.
- ¿Qué cambio quieres generar en el mundo?
El cambio que deseo generar en el mundo es el poder demostrar que, sólo juntándose en una masa enorme de personas que sigan los mismos ideales podremos hacer un cambio. Demostrar que no es malo dejar las viejas costumbres por unas nuevas. Por nuevas ideologías y principios. Quiero poder convencer a las personas que deben elegirse, que aunque nos tachen de débiles, elegirnos ha sido nuestra mejor decisión. Y al formar una masa que crea que esto ha sido lo correcto, generaremos nuevos pensamientos que compartiremos con nuestras generaciones futuras.
Quiero generar el cambio para que las personas puedan luchar por sus derechos. Que sepan cuáles son y eleven la voz para comenzar a disminuir el índice de injusticias contra los derechos humanos. Quiero que, aunque no sean profesionales del derecho, sepan apelar por lo que les pertenece.
Quiero que seamos más reales, más justos, comprensivos. Nos quiero más humanos.
- ¿Cómo podemos hacer para que más voces jóvenes sean escuchadas?
He de confesar que esta pregunta es muy abierta. La forma en que los jóvenes de hoy pueden ser escuchados tiene muchas variantes. Hoy en día, la tecnología está tanto a nuestro favor como en nuestra contra. Sin embargo, cuando decidimos que esta está a nuestro favor, nos daremos cuenta rápidamente que, hay miles de formas en que podemos ser escuchados.
Tenemos redes sociales, hay personas escritoras (de blogs, poemas, libros, cuentos cortos, artículos, entre otros) así como también personas que cantan y que dentro de cada cosa que crean van dejando los mensajes. Ahora bien, creo que la mejor forma de ser escuchados como jóvenes es no limitándose a hablar un sólo idioma o en el idioma más común que es la escritura. Lo que intento decir es que, para que los jóvenes seamos escuchados debemos hablar en millones de idiomas, comunicarnos por el arte, la música, las experiencias y por miedos. Comunicarnos por poemas o artículos, por lo que estudiamos o por lo que vemos.
Tenemos la dicha de que el ser humano tiene muchas herramientas a la mano, lo único que nos queda es no tener miedo a comunicarnos a nuestra manera. Ejemplo, si yo soy artista y amo dibujar, mi creatividad me ayudaría a que pueda dibujar problemas sociales, trastornos psicológicos o la violencia a los derechos humanos. De esta forma, yo estaría uniendo mi pasión por el arte y estaría siendo escuchada para poder cambiar el mundo.
El ser humano tiene la maravillosa habilidad de escuchar, hablar y entender de muchas formas. Solamente no debemos de tener miedo a experimentar y hablarle a los demás en las formas que mejor nos salen. Al final del camino nos debe dar más miedo quedarnos en la crisis que movernos por el cambio.
Por último, quiero decirles a todos los jóvenes. Se que da miedo ser joven, luego da miedo ser adulto. Está bien que la vida misma nos de miedo, pero hoy como jóvenes a pesar de tener miedo hemos sido capaces de elevar nuestra voz y luchar. Requiere de coraje ser sincero frente a una sociedad construida con estigmas erróneos. Se requiere de coraje romper el círculo que traemos de nuestros antepasados.
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